Fútbol de entreguerras: Leyendas de mundiales perdidos y jugadores rebeldes

FÚTBOL MUNDIAL

Fútbol de entreguerras: Leyendas de mundiales perdidos y jugadores rebeldes

Con el paso de los años queda ya muy lejana la tumultuosa época de las décadas de 1930 y 1940, plagadas de guerras y revoluciones. El mundo del fútbol no fue ajeno a los sucesos que asolaban el mundo entonces, y competiciones como la Copa del Mundo de la FIFA tuvieron que verse aplazadas, sin saber si volverían a llevarse a cabo de nuevo. Antes de eso, se planeaba el mundial de 1942, había selecciones nacionales fusionadas, y hasta jugadores rebeldes.

Mathias Sindelar y la selección de la Alemania nazi.

Mathias Sindelar, con la camiseta de Austria.

En 1938 se celebró en Francia el último mundial antes del estallido de la Segunda Guerra Mundial. A aquella cita, ya faltó España, por ejemplo, sumida en la terrible Guerra Civil. El campeón fue Italia, que revalidaba así su título al derrotar a Hungría en la final. En este mundial ya se mostraban algunos elementos de la Europa de pre-guerra que en los años siguientes iban a ser recurrentes: la selección de Alemania presentaba todos los elementos del régimen nazi, tanto el saludo como el escudo con la esvástica en la camiseta. Además, Alemania acudía a la cita con una mezcla de jugadores austríacos y alemanes, ya que Austria, había sido anexionada aquel mismo año por el Reich tras en Anschluss. La FIFA, no se había opuesto a la absorción de los jugadores de Austria por parte de la selección alemana, de los que, que se sepa, solo uno se negó a participar en la nueva selección.

Este jugador "rebelde" era Mathias Sindelar, uno de los mejores jugadores de Europa por entonces, incluso pretendido por el Manchester United, en una época donde los traspasos internacionales no eran tan comunes como décadas después. Apodado como Der Papierene (el hombre de papel) por su habilidad para driblar contrarios, o el Mozart del Fútbol, jugaba en el Austria Viena, y había participado también en el mundial de Italia 1934, donde la selección austríaca había hecho un gran campeonato, y solo el haberse cruzado con los anfitriones italianos, parece que les evitó alcanzar la final. Sindelar, que ya contaba con 35 años y era un veterano a las puertas de acabar su carrera futbolística, se negó a formar parte del nuevo equipo alemán fusionado con el austríaco, alegando que ya no tenía edad para jugar en la selección, o que se encontraba lesionado. Previamente a la fusión, se jugó un partido conmemorativo en Viena, el "Anschlussspiel", entre Alemania y Austria el 3 de Abril de 1938. Austria ganó aquel partido por 2-0, con un gol de Sindelar, quien, según se cuenta, celebró el gol con especial euforia delante de las autoridades nazis.

Sindelar, durante el partido del "Anschlussspiel" de Abril de 1938.

Un año después, en Enero de 1939, Sindelar fallecía en extrañas circunstancias en su domicilio junto con su pareja, Camilla Castagnola, al parecer por una intoxicación de monóxido de carbono. Existen especulaciones a este respecto, si bien pudo ser una muerte accidental, las nuevas autoridades alemanas no veían con buenos ojos las simpatías de Sindelar por los judíos, ni su oposición al regimen, con lo que hay también la teoría del sabotaje de una conducción de gas, que hubiera acabado con la vida del jugador de forma intencionada.

Todo esto, ha contribuido a agrandar la leyenda de Sindelar, el hombre que se negó a jugar en la selección del III Reich, que por cierto, fracasó en el mundial de Francia 1938, al ser eliminada por Suiza a las primeras de cambio.

Selección alemana en Francia, mundial 1938.

El mundial nazi de 1942.

En cuanto al mundial que no se celebró, el de 1942, estaba previsto ser llevado a cabo en Alemania. Tras la cita de 1938, tanto Brasil como Alemania habían planteado sus candidaturas para albergar el evento. Al parecer, aunque a Hitler no le apasionaba el fútbol, y que se sepa solo presenció un encuentro en los JJOO de Berlín en 1936, en la época el fútbol tenía ya un tirón suficientemente mediático como para que el Reich alemán pretendiera repetir el éxito de los Juegos Olímpicos de Berlín en 1936, en esta ocasión con una Copa del Mundo. Como sabemos, la Segunda Guerra Mundial, interrumpiría estos planes, como también impediría planear la celebración de la cita en 1946.

Precisamente fue en ese año, 1946 cuando los representantes de la FIFA volvieron a reunirse en Julio de ese mismo año, para plantear la celebración de un nuevo campeonato. Inicialmente pensado para 1949, se retrasó luego hasta 1950, y sería en Brasil, mundial del que ya ha hemos podido ver algo en este blog hace tiempo.


Falsos documentales con vocación de leyenda urbana: el mundial de Patagonia 1942.

Cartel del falso documental "El mundial olvidado" (Il mundial dimenticato), de producción italo-argentina.

Aunque lo he buscado, no he podido encontrar ningún tipo de "sketch", plano, ni poster del mundial perdido de 1942. Lo que si localicé, es una extraña película documental de producción italo-argentina de 2011: "El mundial olvidado". Este falso documental, narra una historia extraña, comienza con la recuperación de los restos del cámara argentino que filmó el mundial de 1942, el inventor además de la primera cámara subacuática (!). Todo muy curioso.

El resto, narra la historia de un excéntrico conde alemán, "Vladimir Otz" (¿será por lo del Mago de Oz?), fanático aficionado del fútbol que se muda a la Patagonia argentina tras comprar un palacio en Europa y trasladarlo hasta aquella parte tan alejada del mundo, así como sus intentos para llevar la Copa del Mundo a territorio argentino precisamente en la Patagonia. A pesar de que Jules Rimet le da largas, Otz organiza un torneo internacional, incluyendo la copa Jules Rimet, que permanecería en Argentina, siendo la del mundial de Brasil 1950 una falsificación (!). Al final, una selección de indios mapuches consigue alzarse con la victoria ante la selección de Alemania. En fin, descacharrante y plagado de topicazos argentinos. El que la quiera ver:

¡Ojo!, porque hay quien se la ha querido creer como cierta, incluso alguien ha añadido en Wikipedia que estaba previsto que se celebrase el mundial 1942 en Argentina. De hecho he leído varias webs en las que se cuenta esta historia como si tal cosa, vamos, que se lo han creído. Yo esto de los falsos documentales que se intentan hacer pasar por verdaderos no le pillo el punto más allá de que pretendan hacer risa. Pero hora y media me parece excesivo como para no terminar pensando que la han hecho en serio. Ah, lo más gracioso es que salen Roberto Baggio, Gary Lineker, y Jorge Valdano, siguiendo la broma, para darle un toque de seriedad. A Lineker se le escapa la risa y todo.